Virgen María

Menubar

  • Portada
  • Jesus
  • Beato Juan Pablo II
  • Sta. Teresa
  • Don Bosco
  • Imagenes
  • DSI
  • Editar

La Asunción de la Virgen

Publicado por alma
Entrada más reciente Entrada antigua Inicio
"Es muy apropiado en estos tiempos, buscar una mayor profundización y conciencia de la íntima relación que existe entre los Dos Corazones y el valor que tiene para nuestros días, una auténtica devoción y consagración a los Corazones de Jesús y María.”
(Beato Juan Pablo II, 23 de noviembre de 1987).

OCTUBRE MES DEL ROSARIO


Etiquetas

  • Consagración (1)
  • Lourdes (1)
  • Mes de María (1)
  • Natividad (1)
  • Santo Rosario (1)
  • Virgen del Carmen (1)

ORACIONES A LA SANTA MADRE DE DIOS

Acordaos, ¡oh piadosísima Virgen María!, que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a vuestra protección, implorando vuestra asistencia y reclamando vuestro socorro, haya sido desamparado. Animado por esta confianza, a Vos también acudo, ¡oh Madre, Virgen de las vírgenes!, y gimiendo bajo el peso de mis pecados me atrevo a comparecer ante vuestra presencia soberana. ¡Oh Madre de Dios!, no desechéis mis súplicas, antes bien, escuchadlas y acogedlas benignamente. Amén.

AVE MARÍA

Dios te salve, María; llena eres de gracia; el Señor es contigo; bendita tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesus. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

SALVE

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra; Dios te salve. A ti llamamos los desterrados hijos de Eva; a ti suspiramos, gimiendo y llorando, en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora, abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos; y después de este destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre, ¡oh clementísima, oh piadosa, oh dulce siempre Virgen Maria! Ruega por nosotros, santa Madre de Dios. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo.

BENDITA SEA TU PUREZA

Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, pues todo un Dios se recrea en tan graciosa belleza. A Ti, celestial Princesa, oh! Virgen Sagrada María, yo te ofrezco en este día alma, vida y corazón. Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía.

Amén

Tema Fantástico, S.A.. Con la tecnología de Blogger.